En el inicio de 2025, los bonos soberanos de Argentina continúan mostrando una tendencia positiva, con ganancias de 1,4% en promedio. Los bonos Globales en dólares en el exterior ya promedian un máximo de USD 71, y el riesgo país ha disminuido a 610 puntos básicos, un nivel no visto desde noviembre de 2018. A lo largo de la jornada, el riesgo país tocó los 608 puntos, lo que indica una mejora sustancial en la percepción de los inversores sobre la deuda argentina. El índice de JP Morgan, que cerró 2023 en 1.908 puntos, ha descendido en más de 1.400 puntos desde entonces, lo que refleja un cambio de tendencia en el mercado.
Según el economista Gustavo Ber, los bonos siguen mostrando mejoras significativas en sus cotizaciones, y el riesgo país se aproxima a los 600 puntos básicos. “Los operadores aprovechan cualquier descanso para reforzar sus apuestas en los activos domésticos”, afirmó Ber, destacando el optimismo de los inversores locales frente a un entorno internacional más cauteloso, especialmente en Wall Street.
Ignacio Murúa, asesor financiero, también consideró que los bonos soberanos aún tienen espacio para seguir creciendo. Con un riesgo país proyectado entre 550 y 600 puntos, se espera que los bonos, como el GD35 y GD41, puedan registrar aumentos de hasta 10% en 2025. Por su parte, Walter Morales, CEO de Wise Capital, predice que con el superávit fiscal y la liberación del cepo, los bonos argentinos seguirán subiendo, y el riesgo país podría bajar a 380 puntos básicos, lo que implicaría subas de más de 25% en dólares.
La deuda soberana de Argentina sigue siendo un activo atractivo, con pagos de capital programados para este mes y una cifra de depósitos de USD 5.698 millones que garantiza la capacidad del Tesoro para cumplir con los compromisos. Con un rendimiento notablemente positivo, los bonos argentinos continúan siendo una opción de inversión en un entorno económico de optimismo moderado.
