El Gobierno de Argentina comenzó la semana en medio del escándalo cripto, tras la polémica publicación de Javier Milei en X, en la que promocionó un token de criptomoneda. Sin embargo, el oficialismo se mostró tranquilo ante la situación, argumentando que el Presidente había sido “el único estafado” en este proceso. Los funcionarios que regresaron a Casa Rosada este lunes, tras las denuncias, se encargaron de desvincular al mandatario libertario de cualquier responsabilidad en el asunto, asegurando que “no tiene ninguna culpa”.
A pesar de los intentos de transmitir calma, la comunicación libertaria sufrió un golpe el viernes pasado cuando Milei publicó en sus redes sociales una criptomoneda que, en minutos, pasó de valer cero a multiplicar su precio exponencialmente. Rápidamente, los principales involucrados retiraron el dinero, lo que provocó el colapso de la inversión y dejó a muchos usuarios con pérdidas. Algunos especialistas consideran que este mecanismo podría calificarse como un “rug pull”, una estafa en el mundo de las criptomonedas donde los creadores abandonan el proyecto y se quedan con los fondos invertidos.
Ante la situación, el Presidente eliminó la publicación original y negó tener vínculos con el proyecto Libra. La Oficina Anticorrupción fue puesta al tanto para investigar posibles irregularidades dentro del Gobierno. En medio de la controversia, un funcionario libertario defendió al presidente, señalando que el Gobierno de Milei es el único que se está investigando a sí mismo.
Además, en el marco de esta crisis, surgió la figura de Hayden Mark Davis, el creador de la criptomoneda Libra, quien confirmó ser asesor de Milei. En una entrevista, Davis aseguró que su intención era devolver el dinero a los inversores afectados, pero criticó la falta de apoyo por parte del Ejecutivo. Desde Casa Rosada, se desmintió cualquier comunicación directa con Davis, aclarando que todas las reuniones relacionadas con criptomonedas fueron públicas y estuvieron bajo la supervisión de la hermana del Presidente, Karina Milei.
Este escándalo cripto ha desatado una serie de interrogantes y especulaciones que siguen poniendo a prueba la imagen de la administración de Milei. La situación continúa en desarrollo mientras el Gobierno refina su estrategia para reducir la tensión en torno a este delicado asunto.
