En el marco de una nueva audiencia por el juicio que investiga la muerte de Diego Armando Maradona, este jueves brindó declaración Sebastián Nani, quien se desempeñaba como jefe de Cardiología en la Clínica Olivos, lugar donde el ídolo fue intervenido quirúrgicamente el 3 de noviembre de 2020.
Durante su exposición ante el Tribunal Oral en lo Criminal N°3 de San Isidro, el médico explicó que Maradona no presentaba signos de complicaciones cardíacas durante su estadía en la clínica, y que desde su especialidad no se esperaban problemas coronarios. No obstante, remarcó que por sus antecedentes, el exjugador debía ser considerado un paciente de riesgo, lo que implicaba una atención médica mucho más rigurosa.
En esa línea, Nani apuntó directamente contra el neurocirujano Leopoldo Luque, al afirmar que era el médico de cabecera de Maradona y que, por lo tanto, tenía plena responsabilidad sobre su salud. Luque está entre los siete profesionales acusados de homicidio con dolo eventual, lo que podría derivar en una pena de 8 a 25 años de prisión.
También declararon Dalma Maradona, quien cuestionó el accionar del médico tras ver fotos de su padre post cirugía, y varios especialistas del sanatorio Ipensa, quienes señalaron que la operación a la que fue sometido Diego no era urgente ni indispensable. Entre ellos, el médico Tunessi recordó que vio a Maradona desmejorado el día de su cumpleaños, mientras que el clínico Marcos Correa indicó que, aunque detectó un hematoma subdural, el estado del paciente no justificaba una intervención inmediata.