El defensor Valentín Gómez atraviesa un momento complejo en su carrera, a raíz de un conflicto con Vélez Sarsfield que podría afectarlo tanto en su futuro inmediato como en su presencia en la Selección argentina. A pesar de haber recibido un llamado del cuerpo técnico liderado por Lionel Scaloni para consultar sobre su situación tras la lesión de Lisandro Martínez en el Manchester United, las tensiones con su club actual, Vélez, complican su convocatoria para la próxima doble fecha de Eliminatorias Sudamericanas.
El grupo Foster Gillet, propietario de su pase, aún no ha abonado el dinero por la recisión de su contrato, lo que deja al defensor sin poder unirse al Udinese de Italia, su nuevo equipo. La deuda asciende a 8,5 millones de dólares, con un plazo límite para su pago hasta abril. Mientras tanto, Gómez se ve obligado a entrenarse solo, en una plaza en Italia, acompañado únicamente por un preparador físico.
El club de Liniers, por su parte, se niega a darle una carta de autorización para entrenarse en las instalaciones del Udinese por temor a posibles lesiones que puedan afectar su transferencia. Este complicado panorama podría dejarlo fuera de la convocatoria de Scaloni para los partidos contra Uruguay y Brasil en marzo de 2025, claves en las Eliminatorias.
De esta forma, la situación de Gómez se mantiene incierta, mientras la Selección espera contar con su presencia en los próximos compromisos.