Este jueves, un submarino turístico que transportaba a turistas rusos se hundió en el Mar Rojo, frente a la costa egipcia de Hurghada. El trágico accidente dejó un saldo de seis muertos y al menos nueve desaparecidos, mientras las autoridades continúan con la búsqueda de las víctimas. Según informes del diario local Al-Masry Al-Youm, el submarino habría sufrido un desperfecto, lo que desencadenó el desastre.
A bordo del submarino había 45 pasajeros, incluidos menores. 29 personas fueron rescatadas, pero cuatro de los heridos se encuentran en estado crítico. La Embajada de Rusia en Egipto confirmó que todos los turistas a bordo eran de nacionalidad rusa. La compañía Sindbad, responsable del tour, ha operado en la zona de Hurghada durante varios años y es conocida por ofrecer excursiones en submarinos que permiten a los turistas explorar a 25 metros de profundidad el arrecife de coral y su vida marina.
Este incidente no es el primero en la región. En noviembre, un barco turístico llamado Sea Story se hundió en las mismas aguas, causando la muerte de 11 personas, incluidos turistas británicos. Las autoridades egipcias señalaron que las olas de gran altura fueron la causa, pero los sobrevivientes mencionaron fallos de seguridad. Además, un informe del Reino Unido reveló que en los últimos cinco años hubo 16 incidentes relacionados con embarcaciones turísticas en la zona, algunos de los cuales también terminaron en tragedia.