El presidente Javier Milei firmó un decreto poco antes de la medianoche de este lunes, ordenando una importante reestructuración en la Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA). La medida implica una “reducción de la estructura inferior” del organismo, que deberá ajustarse en torno al 45%, lo que representa un recorte significativo en su personal. Además, el decreto establece una baja del 80% en los salarios de los cargos jerárquicos dentro de la agencia, con el objetivo de reducir el gasto público y promover una administración más eficiente.
El vocero presidencial, Manuel Adorni, informó sobre la firma del decreto a través de las redes sociales, destacando que “se terminan los privilegios y el gasto desenfrenado en ARCA“. Esta decisión se enmarca en la política de austeridad fiscal del gobierno de Milei, que busca optimizar el funcionamiento del Estado y reducir los costos operativos.
La medida se da en un contexto de tensiones políticas, especialmente con la vicepresidenta Victoria Villarruel, quien había cuestionado públicamente su salario. Esta reforma se suma a la iniciativa anunciada por Milei en octubre, cuando presentó la disolución de la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) y su reemplazo por ARCA, un organismo que, según el gobierno, debería operar con sueldos más alineados con los de los ministros del Gabinete.
Con esta reestructuración, el gobierno prevé un ahorro significativo de 121.000 millones de pesos para 2025, provenientes de los recortes salariales y la reducción del presupuesto destinado a la jerarquización de la agencia. El objetivo es reducir el número de cargos jerárquicos a solo nueve, mientras que la planta de empleados será reducida en un 45%, con un presupuesto ajustado que responde a la necesidad de optimizar los recursos dentro del Ministerio de Economía, presidido por Luis Caputo.
